El viernes 1 de Enero 2010, se entrego 100 mil pesos a las comparsas y se espera poder pagar lo que falta en estos días. Tras pagar aguinaldo y sueldos, el viernes en horas del mediodía, el Intendente Municipal Eduardo Galantini, junto al Coordinador de los Carnavales “Cacho” Galarraga, hizo entrega de 100.000 pesos a las seis comparsas casereñas. Esto corresponde a la segunda cuota del subsidio programado como ayuda para que tanto “La Nueva Shangay”, “Carum Bera”, “Carumberacito”, “ Orfeo” , “Orfeito” y “Grupo Alegría” puedan lucir de la mejor manera posible su brillo y alegría en el cosmódromo casereño.

 “Esperamos poder pagar la ultima cuota en estos diez días” confirmo el coordinador de los Carnavales “Cacho Galarraga. Para así poder ayudar un poco más a la organización de las distintas comparsas y cumplir con el compromiso contraído.

Año a año, los carnavales como fiesta popular son organizados, coordinados y apoyados económicamente por el

Municipio. Con respecto a la edición 2010, ya fueron entregados  281.000 pesos, de los 450.000 previstos para estos Carnavales.

 En comparación con años anteriores se incrementó en unos 60.000 pesos el monto total de la ayuda económica que se realiza a las comparsas. Incremento basado en las posibilidades del municipio por un lado y en coherencia con el aumento de los costos.

Este año, las comparsas recibirán un total de $ 450.000 pesos. Distribuido $ 123.000 a Orfeo y Carum Bera, $ 88.500 a La Nueva Shangay, y $ 38. 500 a las menores (“Orfeito” y “Grupo Alegría” y “Carumberacito”). Cebe destacar que los montos fueron acordados conjuntamente por el Coordinador de los Carnavales y los representantes de las distintas comparsas.

 El mismo espíritu de trabajo mancomunado, existe en relación a las modificaciones de reglamento con el que las comparsas van a  ser calificadas y en la elección de los jurados.

 El carnaval ya está en marcha y en etapa de cuenta regresiva. El 23 está cada vez más cerca  y este año con una gran expectativa de volver a ser una fiesta del pueblo y para el pueblo, con entradas “populares” y accesibles, menores a las de años anteriores